Una mano, blanca y fría. Respira. Oscuridad. Respira.
Escucha el sonido de su respiración…Pisadas, oscuridad, respira…Una mano blanca
y fría rodea su cuello, tocando su piel desnuda, recorre su silueta recreándose
en cada parte de su cuerpo.
La mano se separa. Respira. Oscuridad. Frío…silencio. Se oye
el sonido de una gota cayendo, señal de un grifo mal cerrado, resuena a lo
lejos recreando el peor de los temores. Pisadas, oscuridad, crujido de la madera
del suelo…la mano se acerca al cuello, lo envuelve. Presión…no hay aire…la mano
se separa para quitar un mechón de pelo con infinita dulzura y dejar al
descubierto su oreja…nota un aliento cálido en su cuello…susurros
indescriptibles…Conversaciones sin significado resuenan en su cabeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario